31 años ya ... y parece que fue ayer cuando dejó de pisar este suelo por el que caminamos cada día .... Siento tardar tanto en volver a escribir y, sobre todo, hacerlo de un tema triste para muchos pero ahora pregunto yo ¿triste porqué?. Le dejamos de ver, pero no dejamos de estar con Él, de sentirle o, incluso, escucharle. Que una persona se muera no quiere decir que se vaya y ni siquiera creo que El Señor muriera ... no era una persona como el resto para denominar de muerte lo que le pasó, sino que, simplemente, se mudó, hizo las maletas y regresó del lugar del que venía ... Eso es lo que estamos celebrando hoy, porque lo estamos celebrando, que compartió tierra, comida y casa con nosotros y tal día como hoy se despidió para regresar junto a su Padre.
Desde allí nos apoya, nos habla y nos escucha, y hacia allí le mandamos nuestro amor y buenas obras (que espero todos hagáis).
Un beso a todos y a sonreír, que estamos de celebración.
Mari.