jueves, 27 de diciembre de 2012

Lola

Aquí os publico un testimonio más, el de Lola, que nos explica cómo conoció a El Señor mientras aún vivía en "Los Chopos" y cómo le ha cambiando la vida desde entonces.

"Me llamo Dolores, pero todos me conocen como Lola, y voy a contarles que, mi marido y yo, somos de un pueblo muy cerca de "Los Chopos", aunque actualmente vivimos en Madrid, desde aquí hicimos un viaje para visitar a la familia del pueblo y decidimos pasar por la casa del Señor, donde le conocí.
Cuando llegamos había muchísima gente, de muchos sitios distintos, y cuando El Santo Manuel salió nos dio a todos su bendición y lanzó unos "vales" de los que no pude coger ninguno. Se lo dije y él me lo dio con una sonrisa muy especial, así le recuerdo, como una persona irrepetible que hacía que en su casa se respirara un aroma indescriptible.
Esos "vales" que Él lanzaba a la gente eran para que pudieran comprar pan, pero yo no lo supe hasta años después. Desde hace 35 años lo guardo como la mayor reliquia que hay sobre la tierra, y hoy lo voy a compartir con todos vosotros.

Ahora sólo puedo darle las gracias por haberme puesto a María en el camino, que me permite volverlo a ver cada Jueves.
A María la conocí hace 18 años, me hablaron de ella y fui a verla con mi hija. Habíamos perdido a mi madre hace unos meses y lo estábamos pasando muy mal, en especial mi hija que, al estar muy apegada a su abuela, sufrió una anorexia nerviosa que, gracias a María y a las manos del señor se curó. Por ello, le doy unas gracias infinitas a El señor por haberme concedido la gracia de conocerle y a María, que con sus manos, con las manos del señor curó a mi hija que desde entonces no se separa de su fotografía.

¿Qué puedo decir de María?, es tan especial, tan diferente a todo lo que os habréis imaginado que no sé cómo se puede describir a alguien dotado de semejante gracia, humildad y ganas de vivir ayudando a los demás. Está llena de generosidad y bondad, siempre está ahí cuando la necesitamos y da todo lo que tiene por que seamos felices.
Todos los Jueves estamos con María para rezar el rosario en su casa; se respira tanta paz y tranquilidad que al salir parece que fuéramos otra persona .... porque sus manos son las del señor, y eso no hay lugar en el mundo para igualarlo.

Que Dios os bendiga.
Lola"



Como podéis ver, acompañando al testimonio de Lola, os he publicado una imagen de los "vales" de los que os ha hablado anteriormente. Con cada uno se podía comprar un pan e iban destinados a las personas con menos recursos, para que nos les faltara el pan en sus casas.
Gracias por estar ahí cada vez que publico algo nuevo, sin vosotros al otro lado del ordenador no sería posible dar a conocer lo que El Señor y María hacen y han hecho a lo largo de los años.
Mari.

viernes, 14 de diciembre de 2012

¡Feliz Navidad!

No se me ocurre otra palabra mejor para describiros a todos vosotros que "afortunados", porque no sólo María os escribe personalmente si no que me ha confiado unas palabras para felicitaros las navidades:

"Jesús nació para todos nosotros, nos trató a todos por igual y, por ello, no desea otra cosa más que todos tengamos un pedazo de pan que llevarnos a la boca. Quisiera deciros que, aprovechando que este año tengo la oportunidad de comunicarme con vosotros a través de este blog que, esto no es así, que hay muchos ricos y muchos pobres, que Jesús no vino a este mundo sólo para unos pocos poderosos, que está en todos nuestros corazones, ricos, pobres, grandes, pequeños, cristianos, musulmanes, budistas ... que si tuviéramos una pizca de humanidad entre todos conseguiríamos que todo el mundo disfrutara de agua y alimentos, de una forma más o menos lujosa, pero lo tendrían; por esto os pido que aquel que esté leyendo esto y tenga la oportunidad comparta lo que Dios nos ha concedido; que el sol sale para todos y no sólo para los que tienen fortunas inmensas, que todos al nacer estamos desnudos y que no conozco a nadie que haya venido al mundo vestido, por ello, este pan que veis en la imagen es el símbolo de lo que debe haber en nuestras casas, la sencillez y humildad de algo tan imprescindible como la comida. Aunque, a veces, se utilice este propósito nada más que para el beneficio propio. Esto último no lo digo para que se lo lleve el viento, si no porque hace un par de días oí en un programa de televisión que ahora hay más pobres que antes, que hay gente en particular que llevaban una vida de alto nivel y que, ahora, lo está pasando mal, que se verían obligados asistir a los comedores sociales para poder vivir el día a día pero que les da vergüenza hacerlo. En mi opinión todos somos iguales, si a ellos les da apuro que les vean siendo ayudados por los demás para poder comer, a los demás les sucede lo mismo. Bien, pues en este momento intervino un cura, el padre Ángel, diciendo que iba a proporcionarles unos "vales" con los que podrían comprar lo que necesitaran en El Corte Inglés. ¿no somos todos iguales? Es realmente vergonzoso que una persona de la Iglesia discrimine de esta forma a las personas que tienen o han tenido dinero de las que no.

Pensad en estas cosas cuando veáis la comida de la cena de Nochebuena o Navidad, sentid que tenéis la fortuna de  poder comer y acordaros de toda la gente que no puede hacerlo.

Feliz Navidad a todos.
María."



miércoles, 5 de diciembre de 2012

Testimonio de Beni.

Hoy voy a cambiar un poco la tónica de las anteriores publicaciones y me voy  a decantar por publicaros el testimonio que ha dejado en mis manos Beni, en el que nos cuenta algo que ocurrió hace algún tiempo en casa de María. No voy a hablar más, sino que os dejo que lo leáis y disfrutéis:

"Soy Beni, y quiero compartir con vosotros un capítulo del gran libro de la vida que El señor comparte con todos nosotros. Tal y como empiezan los cuentos, ocurrió en casa de María 6 años atrás, una buena tarde en la que nos reunimos para conmemorar el día de la Virgen de la Inmaculada. Estábamos rezando el rosario  cuando El Señor se manifestó en María; entonces pidió que le trajeran un cuchillo y una calabaza, que una de nosotras llevábamos en una bolsa. No salíamos de nuestro asombro mientras veíamos cómo con la puntita del cuchillo dibujaba la cara de lo que después sería "La Virgen de las Lágrimas".
La bautizó así porque en cuanto terminó de hacerla empezaron a brotar lágrimas de sus ojos (tal y como podéis comprobar en la imagen que os pongo debajo) y, desde entonces, todos llevamos su imagen con nosotros.

Que Dios les proteja.
Beni."

Aquí os dejo a imagen de La Virgen de las lágrimas, imagen que nos recuerda que El Señor siempre va con nosotros, allá donde estemos, por muy lejos que vayamos o diferentes que seamos. Para que nos demos cuenta que una calabaza es igual de valiosa que la más cara de las imágenes del Vaticano.
Mari.



lunes, 26 de noviembre de 2012

Manto de la Virgen de la Cabeza

Con este blog no busco otra cosa que dar a conocer cada una de las palabras que El Señor, a lo largo de los años, nos ha ido comunicando así como sus hazañas y milagros. Por esto, y porque Él siempre nos recuerda que una de las mayores virtudes que puede tener el ser humano es la honestidad y la sinceridad les voy a contar la pequeña y gran historia del manto de la Virgen de la Cabeza, un manto que pertenecía a los curas de la iglesia de Sierra Morena y que hace unos 35 años se lo confiaron a El Santo Manuel para restaurarlo, ya que lo habían intentado varias veces sin éxito.
Por aquel entonces el manto tenía unos 750 años, de forma que ahora acumula más de 780 años a sus espaldas, y pese al valor incalculable que tenía se lo prestaron a El Santo Manuel porque, sabiendo quién era, pensaban que Él sabría mejor que nadie qué hacer con el manto. De esta forma El Señor escogió a una de las personas que iban a verle asiduamente para que se encargase de devolverle la belleza que los años le había quitado, y a la vista está el resultado.
Esta foto que veis debajo de estas líneas es la que se hizo El Señor con el manto una vez restaurado. A Él no se le ve la cara, como de costumbre, pero si os fijáis se pueden ver unos pies en la parte inferior de la foto, unos pies que fueron besados por multitud de personas y que Él mismo quiso que se vieran, para que todos vosotros, tanto los que lo conocisteis como los que no, podáis verlos.

¡Espero que os guste!


viernes, 26 de octubre de 2012

Algo inesperado


¡Hola a todos!
Tanto para los que seguís habitualmente el blog como para los que lo leéis por primera vez os tengo una sorpresa, María os ha escrito unas páginas de su puño y letra para que la conozcáis de primera mano, sin trampa ni cartón, nada más que ella, unos folios y un bolígrafo.
Os he dicho varias veces que es alguien sencillo, humilde, sin estudios ... y muy especial. Ahora podréis judgar vosotros mismos si lo que os dije se adapta a la realidad, exagera o se queda corto.
¡Que la disfrutéis!








sábado, 29 de septiembre de 2012

Artículo sobre El Santo Manuel


Aquí os dejo el artículo que, como ya os dije en la entrada en la que os hablo de María, habla sobre El Santo Manuel, para que veáis que lo conocía muchísima gente.











viernes, 21 de septiembre de 2012

Alguna foto para empezar


Como lo prometido es deuda os publico unas fotos de María, para que pongáis cara a esta persona de la que tanto os he hablado y sobretodo para que comprobéis por vosotros mismos la sencillez que plasman las siguientes imágenes:




Esta fotografía, como podéis ver la he escaneado de la original que se hizo hace aproximadamente 25 años, en lo que ahora es El Templo de Los Ángeles, del que ya os he hablado.
Dicen que una imagen vale más que 1000 palabras, pero os voy a proponer una cosa, decidme con una sola palabra lo que os evoca esta imagen, y luego leed mi publicación anterior de nuevo, entonces estaréis más cerca de comprender la grandeza de lo que os estoy contando.




En este caso creo que la fotografía habla por sí sola ... son las manos de María, a través de las cuáles se han realizado, se realizan y se realizarán cantidad de milagros.




Esta ya es más reciente, es María, hace apenas una semana, en Jaén, en la casa donde vivió y recibió a tantísima gente El Santo Manuel. Seguro que muchos de los que me leéis habéis reconocido el lugar, decidme ¿recordáis aún lo que sentisteis en el momento llegar allí?




Y por último su tumba, la tumba de El Santo Manuel, donde no han dejado de llegar flores y velas, montones de recuerdos, experiencias y milagros que mantienen vivo ese agradecimiento eterno e infinito de toda la gente que le conoció.

viernes, 27 de julio de 2012

María y El Santo Manuel

Esta historia la he hecho a partir de pedacitos de conversaciones que María, mi madre o cualquiera de las personas que vamos a su casa cada Jueves me han contado.

El nombre del Blog es el de un hombre, Manuel, que nació en Jaén un 27 de Mayo de 1912. Él era un hombre normal, como usted o como yo, vivió la guerra civil española, sin estudios y trabajando en el campo, como otros muchos. Pero sí, había algo que lo diferenciaba del común de los mortales, algo que él conocía desde pequeño. Muchas veces me han contado que cuando tenía 5 años quiso decírselo a sus padres, pero era como si se le anudara la garganta y no era capaz de articular palabra.
Fue pasando el tiempo y llegó un momento en el que El Padre Eterno le dio su permiso para mostrar quién era, para empezar a hacer milagros.
Intentad retroceder en el tiempo, aproximadamente a 1930, año en el que un buen día un labrador empieza a   hacer milagros. Curaba a los enfermos, dónde, cuándo y quienes fueran, con un soplo o con el mero contacto de sus manos aquellas personas sanaban.

Por nuestras manos pasan cientos de objetos al día e incluso eso que a todos nos gusta tanto tocar ... el dinero. Sólo pretendo decir esto una vez, aunque me lo han repetido todas y cada una de las personas que me han hablado de él. Atendía a todo el mundo, fueran ricos, pobres, blancos o amarillos. En ningún momento trató a una persona mejor que a otra y nunca tocó con sus manos una sola moneda o billete que mucha gente le ofrecía.
A él iban muchísimas personas con la esperanza de curarse, enfermos de cáncer, parapléjicos, mujeres que no podían tener hijos ... etc para agotar así la última posibilidad de curación que les quedaba, y muchas de esas personas llevaban flores, dinero y regalos para que les atendiera mejor o antes que a nadie ... nunca lo hizo. No aceptaba nada de lo que la gente le llevaba, porque para él todos éramos y somos personas iguales.

Esto que os acabo de decir, ¿no os recuerda a alguien?. Os he dicho que él sabía quién era, pero aún no os he dicho quién era Manuel.
Creyentes o no conocéis que Dios mandó a su hijo en forma de hombre para perdonar los pecados del mundo ¿verdad?, ese hijo era Jesús o El Señor como le nombraré muchas veces. Pues Jesús no ha estado sólo una vez con nosotros en la Tierra, sino dos veces, lo que pasa es que esta última vez había demasiados intereses por parte de sectores de la sociedad para que no se conociera.

Él era Manuel, por eso hacía las cosas que nadie más era capaz de hacer.
Con esto quiero dejar claro que Manuel, El Santo Manuel como más tarde se le conocería, no era un curandero sino El Señor en carne y hueso.

Lo sé, creo adivinar lo que se os está pasando por la cabeza en este momento, habrá personas que pensarán cosas buenas y otras que pensarán barbaridades, eso mismo pasó entonces; había gente que sabía quién era e iban a su casa a curarse o simplemente a escucharle hablar y estar con él, pero también, pero también hubo personas que se sintieron intimidadas y, al igual que le pasó 2.000 años atrás, le denunciaron. No sé que movería a esa gente a denunciar la grandeza que tenían delante, pero un Jueves Santo se presentó en su casa la Guardia Civil y delante de todos los que estaban con él le arrestaron y le llevaron a interrogarle al cuartel de Alcalá La Real, desde donde le trasladaron a la prisión de Jaén.
Allí estuvo preso 14 días en los que no probó bocado, ni comida ni agua, saliendo en las mismas condiciones físicas en las que había entrado. No hizo más que encomendarse a Dios y él le alimentaba.
Al ser tan extraño que una persona aguante 14 días sin comer ni beber, mejor dicho, que sobreviva a ello, antes de salir le tomaron una muestra de sangre para analizar las condiciones físicas en las que se encontraba.
Ahora nos extraen sangre con una jeringuilla y un aguja, pero en aquella época los análisis eran diferentes; sacaban la sangre y de ella cogían una gota que depositaban sobre un pequeño cristal rectangular y, en ese momento, sobre el cristal se empezaron a vislumbrar unas formas que, más tarde se verían claramente como la Ostia y el Cáliz.
De la sangre extraída analizaron una muestra y debieron de salir unos resultados extraordinarios para que los propios médicos dijeran que era algo completamente nuevo en el mundo, algo especial que fue mandado a Roma, donde sigue guardado en algún lugar de La Ciudad De El Vaticano, de donde puede ser que salga algún día, cuando todo esto se conozca en el mundo entero. Porque a la Iglesia no le interesaba, Manuel era una persona normal, pobre, sin estudios ni alto rango social, que haría tambalearse esa Iglesia que los hombres han creado a su medida. Por eso se calló, se guardó la prueba u pasó a ser un secreto más.
"Se puede ir, tiene una sangre divina", fue lo que los médicos dijeron a El Señor justo antes de dejarle libre. La gente seguía yendo a su casa a la aldea de Los Chopos como se la conocía, pero nunca más volvieron a meterse con lo que él hacía.

Por aquella casa de la aldea de Los Chopos de Jaén pasaron miles de personas, cada una de ellas diferente a la otra, desde cualquier parte de España e incluso del extranjero. Se acercaban allí a recibir una sola bendición de El Santo Manuel , del Señor, que lo hizo indistintamente a lo largo de toda su vida.
Hace aproximadamente 30 años, toda esa cantidad de gente que allí se acercaba  llamó la atención de Jiménez del Oso, que fue con la intención de grabar a aquel hombre a quién llamaban santo y no salía en las fotos.
Sí, le hicieron muchas fotografías y en ninguna de ellas aparecía. Esto que os cuento fue publicado en un artículo que trataba del Santo Manuel bajo el nombre de "El Santo Manuel, un curandero ensalmador que no sale en las fotografías", escrito por Joaquín Gómez Burón y con fotografías de Antonio Martín Alonso.
Tengo el artículo en casa así que en unos días os lo publicaré  en este mismo blog para que podáis leerlo y  comprobar cómo unos años atrás esto ya se conocía.

Allí estuvo Jiménez del Oso durante 3 días grabando un documental para la TV. El último día, cuando revisó  lo que había grabado se dio cuenta de que en esa cinta salían todas aquellas personas de alrededor suya, su voz de oía a la perfección, pero su imagen no aparecía. Al contemplar él mismo todo lo que en esa casa ocurría, se propuso decir al mundo lo que allí había, pero no pudo hacerlo, ¿porqué?, intereses queridos lectores ... esos intereses que hicieron que el Cardenal Tarancón usase todas y cada una de sus influencias para que esa grabación y el testimonio de Jiménez del Oso no vieran la luz.

Dios no escoge a los ricos, ni a los sabios, ni a los poderosos, sino que lo único que busca son personas buenas, con sentimientos limpios y sin maldad en sus ojos para hacer el bien. Pero la Iglesia es poderosa y lo más importante, está formada por hombres .... iguales que tú y que yo, pero con mucho poder, capaces de cualquier cosa por mantenerlo. La Iglesia hace santos ... ¿a quién?, a monjas, frailes o curas, no a un pobre labrador.
El mundo está movido por intereses en todos los niveles de la sociedad, sólo hay que abrir un poco los ojos para darse cuenta y empezar a ser un poco más justo.

El Señor murió hace ya 28 años, a las 8:00h de la mañana, pero Él ya lo sabía, y lo dijo. Se lo comunicó a María 8 días antes, diciéndole: "Vuelve, que un día de vida es vida", pero María no pudo volver.
Aquel día toda España supo de la muerte del Santo, e incluso la propia Guardia Civil cortó la carretera que une Alcalá La Real con Alcaudete, al ver la inmensa cantidad de gente que se acercaba a depedirle.
Fue un día triste para toda la gente que le conoció, pero aún recuerdan esas 72 coronas de flores e innumerables ramos que la gente depositó en su casa. Ese día se fue su cuerpo, pero él continúa estando entre nosotros, igual que lo ha estado siempre, porque es el espíritu el que da vida a la carne y sin él no somos nada.

Tengo 22 años, y El Señor murió hace 28, por lo que no le he conocido como El Santo Manuel en carne y hueso, sino que conozco su espíritu. No os puedo describir la cara del Señor porque no la he visto, pero tengo la inmensa fortuna de poder mirarle a los ojos cada Jueves que Dios le da permiso para estar con nosotros en casa de María. A través de ella y desde que nací he estado conviviendo con sus mensajes, con sus milagros y con su presencia.
El Señor se sirve de María para hablar, moverse, curarnos, hacernos reír o advertirnos. Por eso, porque lo conozco desde siempre y porque tengo la necesidad de compartirlo con ustedes estoy escribiendo esto.

María es lo mismo que era Manuel muchos años atrás, una persona normal. Una mujer de 72 años nacida un 9 de Agosto de 1939 en Huéscar, Granada, en una humilde cueva del barrio de San Isidro.

De toda la gente que con ella nos reunimos una vez por semana, unos llevan meses viniendo, otros años y otros, décadas. Aún siendo una de las más jóvenes allí, también soy una de las más veteranas, pues ni andaba, ni hablaba, ni veía cuando llegué a su casa ... ni siquiera había nacido. Mi madre fué por primera vez un 5 de Septiembre y yo nací unos días después.
Desde entonces, María ha cambiado físicamente, han pasado 22 años y el tiempo pasa para todos, pero siempre ha sido la misma persona sencilla y humilde que conocí en los primeros días de mi vida. Con sus problemas, sus alegrías, sus dolores y sus preocupaciones.

A muchos de vosotros os gustará ser el centro de atención, que la gente os mire y esté pendiente de vosotros. A mí, particularmente, me gusta que la gente me diga cuando hago cosas bien, cuando te arreglas, que te digan lo guapa que vas ... vamos, como a todo el mundo, pero no más.
Igual se siente ella, con un don único, inmenso, especial, concedido por El Padre Eterno y sin querer llamar la atención, deseando ser invisible cuando todo el mundo la mira y pidiendo que por favor nos tratemos entre todas por igual, sin que ella tenga un trato diferente.
María tuvo la fortuna de conocer personalmente al Santo Manuel, fue a él siendo muy joven, con una grave enfermedad que allí se quedó, en la aldea de Los Chopos, porque volvió a Madrid completamente curada.
Ella siempre ha tenido problemas de salud, y hoy en día continúa con ellos, pero con 72 años consigue ser una mujer enferma, pero fuerte, capaz de trabajar todo el día fuera y llegar a casa para ocuparse de sus hijos, sus nietos o su marido, con todo lo que eso conlleva.

Ahora y siempre, por muchas cosas que  me hayan pasado en la vida lo más importante  que tengo es El Señor, y esta mujer de andar renqueante que me permite estar con él cada semana.
Esta es mi forma de agradecer todo lo que ha hecho por tanta gente a lo largo de su vida, la forma servicial con la que se ha dedicado a los demás y gracias a la cuál puedo hoy contaros todo esto.
No me imaginéis como alguien con una gran fortuna de dinero, pero sí de espíritu. Soy una estudiante como cualquier otra, pero que ha visto muchas cosas en casa de María. He visto a personas con cáncer curarse, veo a los hijos de mujeres completamente estériles que pasaron por allí 9 meses antes con la esperanza de ser madres ... De esto último hay 2 casos muy recientes que recuerdo perfectamente. Una de ellas es Ana, una mujer que se sometió a 4 fertilizaciones In Vitro sin éxito y que fue allí sin creer en nada ni en nadie, sólo para probar a ver qué pasaba. A la semana siguiente de haber venido se fue con su marido de viaje y a la vuelta ... sorpresa! Juan, que así se llama su hijo ha cumplido un año el 24 de Diciembre de 2011. Yo he estado con él un par de veces, porque su madre lo lleva algún día a casa de María para que le conozcamos, y sinceramente, es un angelito.
Ana ha escrito su testimonio para que yo lo publique en este mismo blog y así todos lo podáis leer dentro de poco.
El otro caso tiene el mismo resultado, aunque los padres no han vuelto por allí. Fue igual de difícil que el anterior, ya que la madre estaba enferma, con un sólo ovario y con el otro ligeramente atrofiado, con ello sus óvulos no eran viables, por  lo que no podría ser madre. Su marido ha ido a casa de María desde pequeño, cumplió su sueño de ser policía y llevó allí a su mujer con la esperanza de tener un  hijo. Allí, en casa de María, la puso las manos y desde ese momento la mujer comenzó a sentir un "huevo", como ella misma decía, un pequeño bulto a la altura de su único ovario que a la semana siguiente se comprobó que era un óvulo, un único óvulo viable que la fue implantado y hoy en día es una niña de aproximadamente un año.
Los dos casos ocurrieron prácticamente a la  vez, tuvieron el mismo resultado: dos niños preciosos que llenaron de felicidad a su familia, pero son diferentes. Una mujer que llegó sin creer en ello y ahora, con su hijo en brazos está dispuesta a decir delante de todo el mundo el milagro que ella misma ha vivido, y la otra persona, que aún viviendo lo mismo llegó, se llevó lo que quería y desapareció.


Como podéis ver Dios no distingue entre creyentes o no creyentes, nos quiere a todos por igual y obra milagros indistintamente de la raza, creencia o religión.

Para María es una alegría inmensa ver cómo El Señor obra milagros a través suya y poder compartir la alegría de un niño o la de un hombre que se recupera con todos nosotros, pero la gente es egoísta, injusta y desagradecida, ya no sólo con María, que no se merece un desplante como el sufrido por estos padres que no se atreven a decir lo que vivieron por miedo, sí, por el miedo a qué dirá el resto del mundo. Esto en un milagro del Señor, y contra ello nada tiene que objetar el hombre ... maldita cobardía.
María no se merece algo así, y por ello estoy dispuesta a todo lo que sea necesario para que su grandeza se conozca y para que el mundo empece a ser algo más justo. Ellos no han vuelto por el Templo de los Ángeles, como todos conocemos a la casa de María y como ella misma la bautizó, pero todo lo que allí ocurre no hay forma de ocultarlo.
A mí me da pena por María, porque sufre en silencio por semejante traición por alguien a quién conoce desde hace muchos años, pero lo que más siento es rabia. Rabia por ver que presumimos de una sociedad en la que ahora mismo sólo importa el dinero, el aparentar y el ser más que nadie, mientras que en el fondo es la cobardía la que aflora. Cobarde y nada  más que cobarde, eso es en lo que se ha convertido el mundo. Un mundo incapaz de cuidar a tierra, la naturaleza y los seres vivos que en ella habitan, desagradecido con aquél que os lo ha dado todo.
Cuando seamos capaces de ver la belleza en un mosquito, o darnos cuenta de que la lombriz que se esconde bajo el suelo que pisamos es igual al perro fiel que nos acompaña cada día, sólo entonces podremos ser justos con nosotros mismos.


Es esperanzador ¿no?, ver como tanta gente sana, tiene hijos ... todos los que estáis leyendo sabéis que hay muchas mujeres en el mundo que quieren tener hijos y no pueden, enfermos que ven cercano el fin ... pues no os deis por vencidos, tened esperanza, que las manos de María son y están para todo el mundo. Aunque cuidado, venid pero no la habléis de dinero ¿eh?, ella no comercia con ello ni cn nada que tenga que ver con El señor. 

María vive en el barrio de Entrevías, y allí podéis encontrarla todos los Jueves por la tarde, aunque si la necesitáis veréis que os pondrá las manos cualquier otro día (si queréis saber más datos podéis contactar conmigo escribiendo un comentario al final del texto y yo os los proporcionaré por correo electrónico).


Como os he comentado un poco antes, María nació en una cueva de Huescar y desde pequeña ayudaba a su madre en la casa, como lo hacía antes todo el mundo, ha ido al colegio lo justo, para aprender a leer y a escribir con cierta dificultad, pero siempre iba al asilo a ayudar a las monjas con el cuidado de la gente que allí tenían. Siempre la ha gustado ayudar a los demás, pero nunca se hubiera imaginado que lo iba a hacer de esta forma. Trabajaba, lavaba y cocinaba con las manos, pero también cura con ellas. Esto es María, sin trampa ni cartón, es una persona con un alma increíblemente buena en un cuerpo maltrecho. Así ha vivido siempre, como alguien normal, en Granada y ahora en Madrid, ha luchado como nadie para sacar a su familia adelante hasta que ha llegado el momento de sacar esto a la luz para que deje de ser un secreto y de esperanza a millones de personas.

Transparente como el agua que nos da de beber a todos y que se escurre entre los dedos de quién intenta utilizarla, porque muchos lo han intentado y ninguno lo ha conseguido, porque esto es muy serio, porque no es ninguna broma y porque no se puede catalogar a María como curandera, espiritista ni nada que se le parezca, porque les estoy mostrando a la persona de la que se sirve Dios para darnos paz cada semana, por ello y por todo el amor que en ella se acumula es la mujer más grande que pueda llegar a conocer nunca.
Es una persona que se ha forjado un futuro a base de trabajar muy duro durante toda su vida, con unos padres de Granada, siendo la mayos de 5 hermanos, sin estudios ni privilegios de ningún tipo que la llevaron a viajar a Madrid con su familia huyendo de la pobreza. Aquí ha vivido desde entonces, ha creado una familia, han muerto sus padres y ha conocido a la persona que gracias a su apoyo, entereza y fidelidad ha hecho posible que yo pueda estar ahora escribiéndoos esto, Paco, su marido. Alguien completamente diferente a cualquier hombre que haya en este mundo, alguien sencillo que permite que su mujer vaya a trabajar a las 4 de la mañana, que vuelva a casa a las 21:00h y que aún así saque tiempo para poner las manos a todo aquel que la espera, alguien que la ha apoyado siempre, siendo así el pilar en el que ella se apoya para seguir adelante. Es difícil ser tan incondicional como lo es él de su mujer, y sus razones tiene ... antes de que María comenzase a curar una noche se manifestó en ella El Señor y estuvo hablando con él más de una hora. Después de eso María se fue a trabajar, como siempre, sin percatarse de nada de lo sucedido ya que ella no es consciente de lo que El Señor hace o dice a su través. Cuando volvió ese día a casa él la preguntó lo que había pasado y vio que María no sabía nada ...  pero no quiso decir más, ha estado callado desde entonces, sin soltar palabra de lo que El Señor le dijo aquella noche y no lo dirá hasta que El Padre Eterno le dé permiso.
Nadie sabemos lo que le dijo, nada, ni una palabra, ni María, ni sus hijos, nadie. Pero realmente tiene que ser algo muy especial para que de la noche a la mañana Paco se convirtiera en el único conocedor de lo que su mujer tenía que hacer, del poder que le había otorgado ... desde entonces ha atendido a todo el mundo que ha ido a su casa, en lo que ahora es el Templo de los Ángeles, una humilde casa del barrio de Entrevías nos reunimos cada Jueves para disfrutar de todo lo que El Señor nos ofrece,su compañía, sus palabras, su fuerza, su esperanza, aunque no estemos enfermos, como es mi caso. Por allí ha pasado mucha gente, desde curas, monjas, gente pudiente, cantantes ... etc, sí, toda esta gente tan variopinta ha conocido a María, y ella los ha puesto las manos.
Con esto os quiero hacer ver que María nunca ha hecho distinciones entre gente pudiente o no.
Cierto gobernador militar destinado a Cartagena y jefe de la Policía Municipal de Madrid recurrió a María en Cartagena, cuando se veía tan enfermo que no encontraba otra salida, entonces la dijo "si puedes hacer algo por mí, hazlo". Su hernia y la úlcera sangrante que padecía curó. Tan impresionado  se quedó que quiso encontrar una explicación "científica" a todo lo que había vivido a través de una serie de personas que trataron de imnotizarla en un chalé de Puerta de Hierro en Madrid; al no poder hacerlo tuvieron que ceder y no volvieron a meterse con ella, a humillarla por un mísero jornal.
El último nombre que he dicho ha sido el de Rocío, que estuvo enferma de cáncer durante unos meses. Fueron a buscar a María a su casa, y lo que más nos repite es su reacción al verla, ya que se esperaba a alguien imponente, a un artista, como o que era, pero nada más lejos de la realidad. Rocío estaba totalmente vencida, demacrada, moribunda. María puso las manos a todas y cada una de las personas que allí estaban, empezando por la sirvienta, lo que provocó las miradas recelosas de todos. ¿Porqué no han dicho nada? ¿Porqué han escondido lo que ocurrió en aquella casa? supongo que no lo dieron la mayor importancia y olvidaron. Fijaos lo fácil que es olvidar ... bueno, no creo que se les haya olvidado sino que prefirieron esconderlo. Su hija, no creo que lo haya olvidado,  no creo que sea tan fácil olvidar un momento en el que El Señor te pone las manos y caes al suelo llorando sin saber cómo parar, delante de todos.
Una semana antes de morir Rocío, María fue a su casa de nuevo, dándola la paz que necesitaba para morir y siendo la responsable de que Rocío muriera con mucha paz y tranquilidad, tal y como ellos anunciaron a la prensa. Qué pena ¿verdad?, que algo así se olvide tan pronto ... La mañana que Rocío murió llamaron a María a casa, Rocío estaba muy mal, agonizaba sin terminar de morir. ¿Qué hacemos?preguntó. Entonces, María la dijo que la pusieran la foto de sus manos en el pecho y, al hacerlo, fue cuando murió, quedó en paz con Dios y se fue.
María también trabajó en casa de una famosa periodista, presentadora de TVE ... ¡20 años!. Como veis María  y su don eran conocidos por mucha gente poderosa que han callado.

Creo que se está haciendo un poco largo ¿no? así que aquí me quedo pues. Les he explicado lo mejor que he podido a vida del Santo Manuel  y de María, pero sólo es una pequeña parte, ya que si os contara todo tardaría horas y más horas y gastaría demasiados cuadernos escribiendo. Aún así hay algo que no puedo guardarme ... un Jueves por la tarde que estaba El Señor con nosotros en el templo, nos puso las manos y nos fue tumbando en el suelo, unos encima de otros, amontonados, y dijo: "dentro de muy poco os veréis así". Ese día era un 4 de Marzo de 2004, una semana después España lloró el peor atentado terrorista de su historia, 200 personas morían un 11 de Marzo de 2004.

El Señor está siempre con nosotros, y los Jueves compartimos el tiempo con él, podemos hablar ... a veces nos dice cosas buenas y otras, cosas que es mejor no saber. Cada vez que recuerdo que 20 personas en el mundo sabíamos que iba a pasar algo, pero no conocíamos el qué, el cuándo y el dónde, me convenzo más de que esto es demasiado grande como para que no se sepa, y que ojalá así pueda cumplir el deseo de María, que después de tanto esfuerzo ya es hora de que se realice. Hay muchos milagros por contar ... serán mis próximas publicaciones.
Recuerdo una frase que culminaría a la perfección esta pequeña "confesión" mía. Se la escribió Leopoldina de Austria en una carta a su marido, Pedro I de Braganza, emperador de Brasil y Rey de Portugal, y que refleja lo que quiero que todos ustedes sientan cuando lean esto, porque les he contado algo que cambiará el mundo y nuestras vidas, usadlo bien.


"La manzana está madura, ¡cogedla!" 

lunes, 16 de julio de 2012

Mari

¿No os ha pasado nunca esa sensación de tener que contar algo y no saber cómo empezar?
Pues eso; he hecho este blog porque ha llegado el momento de levantar la voz y gritar algo que llevo desde pequeña escuchando en bajito, pero no encuentro la forma de decirlo sin provocar una hecatombe internacional o que me arresten por desorden público.

Sea como fuere, lo más cortés es presentarme primero. Imaginaos que estáis en una reunión de cortesanos del S.XVII charlando alrrededor de una mesa de té, pues este es el momento en el que entra el criado y me anuncia ... voy a dejar los ejemplos que me voy por los cerros de Úbeda.

Soy MªCarmen, una chica cualquiera de 22 años, de Madrid, que ha convivido desde que nací con esto que os voy a contar ahora. Os aviso, no es fácil de creer para alguien que lo vive de primeras, en cambio, yo he visto tantas cosas y durante tanto tiempo que, para mí, es como si a un niño le vuelves a contar el cuento de "Caperucita Roja". Pero llega un momento en el que te dicen que basta de hablarlo en bajito, que tienes que salir a la puerta de la calle y vocearlo, ¿saben que? no se imaginan las voces que meto ...
Por eso les estoy escribiendo esto, porque quiero, tengo y debo hacerlo, porque esto es demasiado grande como para que sólo unas pocas personas en el mundo lo sepan o como para que una panda de gente influyente intente taparlo.

Siéntense cómodos, aprobechen para ir al baño, acérquense las palomitas y el agua porque cuando terminen de leer esto les aseguro que nada volverá a ser como antes.